Corre, vuela, pero no te
quedes encerrada,
cuando te ahogues sal a flote,
en esta vida no hay nada tan
malo por lo que dejar de vivir,
tan solo somos marionetas del destino que a
veces nos complican las cosas pero para hacernos más fuertes,
para salir vencedores
de aquellas batallas que dábamos perdidas.
Cuanto más duro caigas rebota más
alto y si vuelves a caer, vuélvete a levantar,
límpiate el polvo y sigue
adelante.
Estamos aquí para seguir nuestro camino y para vivir,
no te dejes
encerrar en un tarro como quien atrapa una mariposa
y la corta su felicidad,
dejándola sin su libertad para volar.
Sé feliz,
llora si haz de hacerlo pero no
te quedes estancada cuando creas que no hay solución a nada.
Da un paso
reflexiona y ya vendrá esa respuesta que necesitabas,
no te amargues la vida
pensando en que está bien y que mal,
vive tu vida,
a tu manera porque si no lo
haces tú nadie lo hará.
Nadie se consume como una colilla,
ni se evapora en el
aire para desaparecer,
asique supera lo malo y vive lo bueno, que el futuro ya dirá.
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